El hospital Clínic de Barcelona ha conseguido reducir en más de un 90% la cantidad de virus en sangre en más de la mitad de los pacientes a los que se les ha suministrado el tratamiento.
Sin lugar a dudas esta es y será una de las mejores noticias en la lucha contra el SIDA a lo largo de este año, aunque los resultados no han logrado ser lo suficientemente buenos como para que se comience a producir en gran escala.
Esta vacuna no es preventiva, sino que se trata de una terapéutica, lo que significa que ayuda al paciente a combatir la enfermedad una vez éste ya la ha contraido.
Este tratamiento, podría sustituir en gran medida la enorme cantidad de medicamentos retrovirales que deben consumir los pacientes, los cuales generan un gran gasto para las arcas públicas y sus efectos secundarios son considerables, por lo que se trata de un gran avance científico en favor de la lucha contra el SIDA.
Según los resultados publicados por la revista científica de salud Science Translational Medicine, de los 24 pacientes que participaron en el ensayo un 55% de ellos consiguió reducir la presencia del virus en sangre en más de un 90%, habiendo un caso excepcional en el que se eliminó el 99,9%.
El tratmiento no produjo ningún tipo de efecto secundario, pero los niveles de VIH en sangre volvieron a subir al cabo de unos meses.
Durante los dos próximos años, el hospital Clínic de Barcelona financiado por la farmacéutica Esteve y la Generalitat, tratará de combinar su vacuna con la de otra experimentales para tratar de aumentar la duración del efecto del tratamiento así como su efectividad.
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